Comentamos con un urólogo en Santander la Historia de la Medicina en nuestra ciudad. Santander era un puerto muy activo y estaba lleno de distintas clínicas que atendían a los habitantes de la ciudad y también al elevado número de emigrantes que iban y venían de América y de otras partes del mundo. Un tiempo romántico sin duda, pero lleno de problemas y desafíos que hoy han quedado en buena parte superados gracias a los avances científicos.
Una fotografía que está revolucionando las redes sociales por lo chocante de la situación. Un hombre vestido de cigarro gigante acude a repartir cigarrillos entre los heridos de guerra estadounidenses en la campaña que se llamó Cigarros para la salud. Ver para creer.

Especialistas médicos en Santander de la época de los vapores

Todo tipo de especialistas médicos en Santander anunciaban sus clínicas y a menudo no tenía reparos en ofrecer tratamientos para unas patologías que todavía estaban muy verdes en cuanto a soluciones médicas se refiere. Los medios eran muy escasos o muchas veces inexistentes, aunque se consiguieron éxitos notables como, por ejemplo, los primeros remedios efectivos contra la sífilis, que era el auténtico SIDA de nuestros antepasados y para cuyos terribles síntomas había muy pocas respuestas que funcionaran.
Las venéreas ocupaban una gran parte de la atención sanitaria de la época por no existir métodos de barrera eficaces que pudieran evitar la transmisión de enfermedades que ahora están volviendo, precisamente, entre otras cosas por ignorar las más mínimas medidas de seguridad y sentido común a la hora de tener relaciones sexuales.
Enfermedades venéreas cuyos síntomas eran a menudo muy inmediatos
Por aquel entonces no existía el SIDA, pero sí te podías encontrar una gran variedad de enfermedades venéreas cuyos síntomas eran a menudo muy inmediatos y que siguen presentes en nuestra casuística actual. Enfermedades infecciosas como la sífilis o la clamidia, que mucha gente no se toma ya en serio, puesto que aparentemente todo tiene solución en los medicamentos y los tratamientos que tenemos ahora mismo disponibles, pero que igualmente siguen siendo preocupantes hoy en día.

En aquellos tiempos en los que no había demasiados adelantos en este sentido y en los que la alimentación y la higiene y muchas cosas, que consideramos hoy fundamentales, estaban todavía en un atraso muy importante, cualquier enfermedad o infección podía causar verdaderos quebraderos de cabeza a los pacientes y a los médicos que se afanaban como podían en ayudar a estas personas. Pero debía ser una misión a menudo imposible y por eso había especialistas que intentaban alertar a la población general sobre los peligros evitables de ciertas situaciones. Porque nadie estaba a salvo.

Impotencia sexual en Santander
La impotencia sexual en Santander tenía supuestos remedios en clínicas en las que se ofrecían muy presuntos tratamientos que son de risas y los comparamos con la enorme efectividad que tiene hoy en día la urología para dar satisfacción a estos pacientes. Como nos asegura este urólogo en Santander, José María Monge Mirallas, esta eficacia ronda el 95%.
Los tabúes y el pudor en torno a la virilidad y a lo que se espera de un macho en el plano sexual siguen entorpeciendo muchísimo, aunque no tanto como hace 100 o 150 años, el tratamiento temprano de la impotencia sexual masculina. Estamos hablando de una situación que puede ser también una alerta con respecto a problemas cardiovasculares, incluso, porque el proceso mismo de la erección tiene mucho que ver con la circulación y la salud cardiaca, por lo que merece mucho la pena que vayamos a ver al urólogo cuanto antes y podamos descartar cualquier complicación de otro tipo.

El tabú de la impotencia sexual en Santander y el mundo

En esas épocas pasadas era muy importante no solamente el ser un hombre en el sentido pleno de la palabra, en cuanto a lo que un macho se ha considerado toda la vida, sino que también estaba el factor reproductivo, ya que era prácticamente impensable que un matrimonio pudiera seguir adelante sin hijos.
Hoy en día, anuncios como el de la foto siguen ahondando en los complejos y problemas de todo tipo con respecto al amor propio, los complejos y las posibles patologías de muchísimas personas.
La alopecia también ha preocupado mucho siempre y es la causa de que todavía hoy haya personas que emprenden viajes a Turquía con tal de poder recuperar esa parte del cabello que les falta. Habría que ver qué clase de tratamiento se podían ofrecer hace 100 o 150 años, o siquiera 50, cuando estas clínicas se anunciaban por toda la ciudad.