Se trata de un sector en el que existe una elevada siniestralidad laboral, con muchísimos muertos por todo el mundo cada año, y no pocos supervivientes heridos, pero esta gente no pierde el sentido del humor y a veces se desempeñan de una manera que a los demás nos hacen flipar.
Vídeos de Youtube con trabajadores de la construcción que se juegan la vida
Deberíamos ser los propios trabajadores los que cumpliéramos e hiciéramos cumplir las más mínimas reglas lógicas de desempeño laboral, en todo momento, pero estos elementos de los que vamos a hablar aquí se juegan el tipo de una forma absurda. Vamos a verlo.
Gente que se esfuerza a tope en las mudanzas
La primera foto está tomada en España, donde es obvio que una mudanza ha terminado un poco mal. Las otras dos fotos son de yanquis que se han tomado muy en serio esto de cambiar de aire y se van a otro sitio con la casa a cuestas.
Gente que se intenta matar en derribos y desescombros
Destacamos la generosidad de este operario de una máquina excavadora que arriba la pala de su máquina para darle una pequeña ducha a un compañero.
Estos trabajadores de una obra no saben que están jugando con su propia vida cuando manipulan mal una enorme máquina de trabajo y prácticamente no tiran encima de uno de ellos toda la estructura que estaban derribando. Y el conductor de la máquina salta en el último momento y no sabemos si acaba también sobreviviendo de ser aplastado por esa enorme grúa que él mismo manejaba y que llega a volcar por inepto.
A la hora de hacer derribos es muy importante que los escombros puedan caerse encima de tu andamio y así poder tirarte al suelo desde la mayor altura posible. Lógicamente, si lo haces, te puedes matar, pero a este personaje no le importa ni lo más mínimo.
Estos simpáticos currantes tienen un método definitivo y muy ecológico para subir los materiales y bajar los escombros. Haciendo ellos mismos de contrapeso con una cuerda. Sorprendentemente, siguen vivos.
Hace falta ser garrulo para tirar la chimenea que estás arreglando o derribando, pues no se sabe muy bien en el vídeo lo que quieren hacer, y conseguir que la chimenea acabe destruyendo el tejado. Pero todos arreglan con unas cuantas horas más de trabajo echadas a lo tonto.
Un viandante se libra de la muerte por un pelo en plan Destino Final El gancho de una grúa pasó por donde se encontraba, pero este señor pudo esquivarlo a tiempo como si fuera un boxeador y librarse por la mínima de una muerte casi segura, ya que semejante objeto pesado haciendo péndulo desde gran altura te puede meter el golpe de tu vida y de la siguiente.
Derriban un edificio con un tipo en lo más alto, el cual habrá fallecido al colapsar la estructura. Un hecho lamentable que probablemente se ha producido en medio de la campaña israelí en Gaza, aunque desconocemos detalles sobre qué hacía ese señor ahí subido cuando el edificio se viene abajo.
Anormales que la lían en trabajos forestales variados
Este otro currante también pensó que el mundo era suyo y que podía subir una pendiente tan elevada con una carga que no era cualquier cosa. Al final, como era de esperar, el peso de la pendiente acabó con él. Acabó con él enterrado debajo de un montón de estiércol.
El único problema que puedes tener a la hora de salir de un pozo cogiéndote a la pala de una pala excavadora es que termines aterrizando al final del pozo con los dientes, pero el mamón del sombrero no lo había pensado.
Si te vas a poner a talar un árbol, sin ninguna medida de seguridad y subido tú mismo en el árbol, por lo menos asegúrate de que eres prácticamente el hermano gemelo de Jackie Chan.
De lo contrario, como les sucede estos otros trabajadores, a pesar de cumplir con las medidas de seguridad básicas se encuentran con que casi matan a un mapache sin querer. El pobre animal salió volando por la fuerza del impacto, pero cayó sin problemas al estilo gato.
Este otro profesional sintió sed en medio del trabajo y se puso a beber cerveza mientras la máquina no dejaba de vibrar y de tirárselo todo por ahí.
Trabajos verticales con verdaderos hombres de acción sin miedo a la muerte
Afortunadamente, cuando todo lo demás falla, el arnés puede ser el único cordón umbilical que todavía te ate a la vida y te salve. Esto es lo que les ocurrió a estos currantes que se quedaron suspendidos cuando el andamio se vino abajo, seguramente por una imprudencia típica como es dejar caer materiales que afecten a su estabilidad.
Es importante comprobar la estabilidad del andamio cuando ya estamos subidos en él y con las herramientas en la mano. De esta manera, si todo falla, es posible matarse más a gusto, pero aunque parezca mentira no son pocos los que lo intentan.
La verdad es que nadie sabe qué demonios estaban haciendo estos personajes, colgados de una grúa sobre el agua, en compañía de algo que tiene pinta de pesar mucho. Como era de esperar, no tardan en desaparecer de la escena y terminan dándose un chapuzón.
Fontaneros con verdaderos problemas con el agua a presión
Estos fontaneros eligieron un mal momento para desatascar la tubería, precisamente con un compañero situado estratégicamente en frente de esa enorme canalización, que empieza a vomitar agua con una potencia que lo arrastra varios metros hacia atrás.
Lo mismo sucede con estos inteligentes operarios que están intentando limpiar un carretillo, siendo uno de ellos proyectado por la enorme fuerza del agua.
Inseguridad laboral en Cantabria
Esto tiene menos gracia, pero es necesario hablar de ello: la inseguridad laboral se cobra sus víctimas cada año, incluso en lugares tan supuestamente avanzados como España. Este accidente laboral en el sector del mantenimiento en Cantabria debe ser investigado hasta sus últimas consecuencias y depuradas las responsabilidades, que no suelen ser de una sola persona nunca.