Hoy tenemos con nosotros a Melania, una chica que trabaja en un restaurante hotel de Mataporquera y a la que queremos preguntar algunas cosas sobre cómo es vivir en esta zona tan bella como solitaria. Una comarca que conozco muy bien desde mis tiempos de adolescente y de jovenzuelo, pues hacíamos siempre el campamento parroquial en esta zona y lo pasábamos muy bien los niños y los monitores.
Lo primero de todo, Melania, ¿de dónde vienes tú y cómo llegaste hasta aquí?
Yo vine de Perú hace dos años y llegué a Mataporquera por el trabajo de mi pareja.
¿Qué te parece la vida rural en esta población del sur de Cantabria con tan poca población?
Tiene sus pros y sus contras, pero me adapté porque las personas son muy amables y te hacen sentir como en familia.
¿Qué se echa de menos de las administraciones públicas en el medio rural?
A lo mejor los trámites, que están centralizados en las grandes ciudades. Pienso que debería ayudarnos un poco más el ayuntamiento.
¿Cómo es criar una familia en esta zona tan alejada de todos los sitios importantes del norte que quedan más cerca, como Santander o Palencia o Bilbao?
Tiene ventajas y desventajas. Si los niños se ponen malos, tenemos que viajar una hora para que sean atendidos de emergencia. Por esto tenemos que tomar precauciones con anticipación y sí, es un poco complicado.
¿Qué es lo que más te gusta de vivir en esta zona despoblada de la Cantabria Vaciada?
Lo que más me gusta es el cierto parecido a mi tierra, con mucho verde y granjas, su gente de campo y la sensación de seguridad.
¿Crees que hay mucho por hacer para activar la economía y la vida social en un sitio como Mataporquera, que fue tan portentoso en otros tiempos y donde no faltaba gente ni trabajo?
Claro que hay mucho por hacer, pero se necesitaría ayudada de sus autoridades para que salga adelante el pueblo.
¿Por qué crees que estáis tan olvidados por todo el mundo en esta zona, a pesar de tener tantos atractivos turísticos y económicos?
Es que el tema de la movilidad: es muy limitada. Si hubiera más autobuses que sería bueno, pero no hay un autobús que vaya directo a Aguilar. Todo es hacia Reinosa y los horarios son complicados en mi caso y para muchas personas del pueblo. Yo conozco migrantes como yo que no tienen movilidad y les cuesta encontrar trabajo y, si encuentran, se van del pueblo. Es por eso también que la gente no se queda por aquí.
¿Qué es lo que más echas de menos de tu país o de otras zonas de España en comparación con lo que tienes en Mataporquera?
De mi país sólo extraño su gastronomía, que es la más rica de mundo. Y, claro, mi familia. De otras zonas de España también extraño que cuando queremos salir a comprar ropa o comida rápida no se puede.
Damos las gracias a Melania por contestarnos y atendernos en nuestro humilde medio y aprovechamos la ocasión para dar un abrazo enorme a toda la gente que vivís en lo rural y en especial en esta zona tan hermosa, de la que tan gratos recuerdos conservo.