Ahora que está de moda, por desgracia, preguntarse por la posible seguridad de los parkings y garajes, debido a lo sucedido en el parking de Bonaire en Valencia y otros garajes particulares, queremos insistir en que se trata de espacios seguros que están pensados para responder a las necesidades concretas para las que fueron planteados. Lo que no puede prever nadie o resolver ni siquiera el Estado no lo va a aportar una simple edificación, pero vamos a ver cómo sólo en circunstancias extrañas se han producido problemas en los garajes. Y es que ha habido muchos casos en los que los parkings de nuestra ciudad han sido objeto de desperfectos muy anormales, pero aparentemente nunca ha sido por causa de la calidad de los elementos de hormigón para parkings en Santander que sirvieron para su construcción.
Fabricantes de hormigón para parkings en Santander y Cantabria
La realidad es que los parkings son muy seguros frente a muchas situaciones por la robustez del hormigón y la técnica y la normativa que se siguen para su construcción. Por ejemplo, tenemos el caso extraño del derrumbe del parking de Nueva Montaña, hace pocos años, en el cual se desplomó todo el techo con el parque y los juegos para niños que había por encima. Un tremendo accidente que fue más espectacular que lamentable en pérdidas humanas, que no se produjeron. Definitivamente, no hubo suerte con estos garajes de Nueva Montaña, pues otro de estos grandes aparcamientos se inundó tan solo dos años después de impermeabilizarlo. El único parking que no se vino abajo en el desplome de 2020 se aisló para evitar que se filtrara agua al interior, pero los vecinos afirman que esta faena pasa «desde el primer día».
Comentamos estas faenas con una empresa de aislamiento de parkings en Santander, Cubiertas y fachadas Barruso:
Las filtraciones en garajes pueden ser causadas por varios factores estructurales y de mantenimiento, especialmente en garajes subterráneos. Uno de los motivos más comunes es una impermeabilización deficiente o deteriorada en muros, techos o suelos. La impermeabilización es crucial para proteger el garaje de la infiltración de agua desde el exterior. Si las membranas impermeabilizantes no se colocaron adecuadamente durante la construcción o se han desgastado con el tiempo, el agua encuentra caminos a través de pequeñas fisuras, facilitando su ingreso. Otro factor que contribuye a las filtraciones es la escorrentía de aguas superficiales. En días de fuertes lluvias, el agua acumulada ejerce presión sobre las paredes y el techo de los garajes subterráneos. Esta presión hidráulica puede forzar la entrada de agua a través de pequeñas grietas o puntos débiles en la estructura. Además, si la zona exterior del garaje no cuenta con un sistema de drenaje adecuado o está obstruido, el agua de lluvia puede acumularse, aumentando la presión sobre las superficies del garaje y favoreciendo la aparición de filtraciones.
Los sistemas de drenaje internos del garaje también desempeñan un papel fundamental. Los garajes subterráneos requieren sistemas de drenaje diseñados para manejar eficazmente el volumen de agua que pueda filtrarse o acumularse en el espacio. Si estos drenajes están obstruidos por sedimentos, hojas, o basura, el agua no podrá evacuar correctamente, lo que ocasiona charcos y humedad en el suelo, e incluso podría elevar el nivel de agua en casos graves, aumentando el riesgo de filtraciones y afectando la estructura en general. Y además de todos estos factores más previsibles existen otros, como los movimientos estructurales, como la expansión y contracción natural del suelo debido a cambios de temperatura o humedad, también pueden contribuir al problema. Estos movimientos pueden generar pequeñas fisuras en las paredes o el suelo del garaje que permiten la entrada de agua. Con el tiempo, estas pequeñas grietas pueden empeorar, permitiendo la infiltración y afectando la integridad estructural del garaje si no se realizan reparaciones a tiempo.
Eliminación de filtraciones y goteras en Santander
Las filtraciones suelen ser el resultado de una combinación de factores que incluyen impermeabilización deficiente, acumulación de agua superficial, sistemas de drenaje insuficientes y movimiento natural del suelo. Una inspección y mantenimiento periódicos pueden ayudar a prevenir estos problemas y a mantener el garaje en buenas condiciones, pero deberían prevenirse problemas a futuro desde el momento del diseño de la construcción.
La reconstrucción del aparcamiento subterráneo de Nueva Montaña en Santander continuaba en marcha dos años después del derrumbe, en 2022. Por entonces, se preveía que la obra concluyera en septiembre, mientras que la cubierta estaría terminada mucho antes, en abril, lo que permitiría a los vecinos recuperar su entorno tal como lo recordaban antes del incidente. Tras el desescombro, primero comenzaron por las labores de hormigonado de la losa de los garajes, avanzando hasta cubrir en abril toda el área que anteriormente ocupaba la plaza hundida, ahora al aire libre. Para ese mes también se esperaba la apertura del garaje número 2, que cuenta con 180 plazas y actualmente permanece cerrado, siendo el más cercano a la zona de trabajo. Cuando los trabajos finalizasen, la urbanización exterior de la plaza sobre los garajes estaría terminada, junto con los acabados y las instalaciones internas. Esta zona incluyó, nuevamente, un parque infantil, aunque con algunas modificaciones para evitar sobrecargas de peso, que parecen estar detrás del desplome sucedido hace 5 años ya. Durante una visita a las obras, el consejero de Obras Públicas, destituido después tras un caso de corrupción, José Luis Gochicoa, y el director del proyecto, Javier Ruiz, informaron a los vecinos sobre el avance. Y destacaron que el proceso, desde el estudio de las causas del derrumbe hasta la ejecución de las obras, ha transcurrido según lo previsto y en el plazo marcado. Aunque los vecinos han reconocido los avances, también han señalado problemas en los edificios, algunos anteriores al derrumbe, y otros que se han agravado debido a las obras, como filtraciones en garajes, trasteros e incluso viviendas. Según Rebeca Martínez, miembro de la comisión vecinal, el garaje 1, con unas 200 plazas y ya en uso, sufre problemas de humedad desde un principio. Los vecinos también expresaron preocupación por los robos en trasteros debido a que el área está más expuesta y solicitaron medidas de vigilancia. El abogado de los vecinos, Rafael de la Gándara, enfatizó que no recibirán la obra hasta que esté en perfectas condiciones, asegurando que la comunidad prefiere una entrega completa y en buen estado, más allá de cumplir el calendario. Gesvican, la sociedad pública responsable, se ha comprometido a revisar las reclamaciones y atender los casos puntuales.
Además, el consejero anunció que los vecinos podrán seguir utilizando las plazas de aparcamiento en El Corte Inglés, ubicado cerca de las viviendas afectadas, gracias a una extensión del acuerdo con el centro comercial. La cesión, que se interrumpió durante las fiestas navideñas, se reanudará el 17 de enero y estará disponible hasta el 31 de mayo, facilitando el estacionamiento a los residentes afectados.
Una empresa de desescombros en Santander nos cuenta el desafío de estas operaciones
Una empresa de desescombros en Santander nos cuenta el desafío de estas operaciones, que son complejas y que necesitan proyecto sí o sí. El desescombro de un parking de grandes dimensiones es una labor compleja que requiere de planificación exhaustiva, recursos especializados y medidas de seguridad estrictas. Este proceso es fundamental en casos de derrumbes, incendios o cualquier otro incidente que deje residuos y escombros que obstaculicen la estructura. La limpieza de escombros no sólo tiene como fin recuperar el espacio, sino también garantizar la seguridad de la estructura y de futuras personas que lo transiten.
Para iniciar el desescombro, el primer paso suele ser una evaluación detallada del área. Un equipo de ingenieros y técnicos inspecciona el estado de la estructura para identificar zonas de riesgo y determinar si existen partes inestables que deban ser reforzadas o aseguradas antes de retirar los escombros. En esta etapa, se recurre al uso de tecnología avanzada como drones, cámaras y sensores para tener una visión completa del espacio sin exponer al personal a peligros innecesarios. La maquinaria utilizada en estos trabajos varía en función del tamaño y peso de los escombros. En un parking de grandes dimensiones, es común que se empleen excavadoras, retroexcavadoras y cargadores frontales para levantar y retirar grandes bloques de concreto y acero. En muchos casos, se deben organizar turnos de trabajo continuos para maximizar la eficiencia y garantizar un avance constante en el retiro de escombros. Adicionalmente, se utilizan camiones de gran capacidad para transportar los residuos fuera del lugar hacia centros de gestión de residuos o reciclaje.
La seguridad es una prioridad durante el desescombro, ya que es una labor que implica un alto riesgo. Los operarios utilizan equipos de protección personal como cascos, gafas de seguridad, guantes y máscaras de filtración para protegerse del polvo y de posibles sustancias contaminantes presentes en los escombros. Además, se establecen zonas de exclusión alrededor del área de trabajo para evitar el ingreso de personas no autorizadas y se cuenta con personal de rescate y primeros auxilios en caso de emergencia. Una vez completado el desescombro, el área es sometida a una última inspección para evaluar la integridad estructural del espacio y determinar si son necesarias reparaciones adicionales. Este paso es crucial, ya que solo con la garantía de que la estructura es segura se puede permitir el uso del parking nuevamente. El desescombro en un espacio de estas características es una tarea exhaustiva y costosa, pero es esencial para la recuperación del área y la seguridad de todos los usuarios futuros del espacio.
Detienen a dos sospechosos por el incendio en un garaje comunitario en Santander (El Alisal)
Otro problema que puede haber en los garajes son las inundaciones por riadas o los incendios. Este último problema suele causar más problemas en las estancias superiores de los edificios que en los aparcamientos mismos, que suelen encontrarse en superficie o en niveles subterráneos.
El fuego de este garaje comunitario en Santander, en el barrio del Alisal, declarado de madrugada, destruyó treinta vehículos y causó daños a más de cincuenta. La Policía Nacional ha arrestado a dos personas sospechosas de estar involucradas en el incendio que, hace casi tres meses, devastó un garaje comunitario en la calle José María Cossío, en el barrio de Los Acebos, El Alisal, en Santander. El incendio, que ocurrió en la madrugada del 11 de abril de 2024, generó gran alarma entre los vecinos debido a la magnitud de los daños. Los sospechosos tienen previsto comparecer este jueves ante el Juzgado de Guardia, mientras la Policía Judicial sigue investigando las causas y el desarrollo del incendio, que se originó alrededor de las tres y media de la madrugada y se extinguió hacia las siete de la mañana. El siniestro causó importantes pérdidas materiales: una treintena de vehículos quedó completamente calcinada y más de cincuenta resultaron afectados. Aunque no hubo víctimas graves, un bombero sufrió un corte en la mano durante las labores de extinción. El humo obligó a los residentes de cuatro edificios a permanecer confinados, sin luz ni agua, hasta que el fuego fue totalmente controlado.
Un incendio misterioso en un parking en Santander
Al salir al exterior, los vecinos expresaron su malestar por el estado de abandono del garaje, que ya había sufrido un incendio en 2007. Según sus declaraciones, las alarmas antiincendios no se restauraron adecuadamente desde entonces, y los sistemas de seguridad eran deficientes, con cables expuestos y otras carencias. El incendio, descrito como “peculiar” por su desarrollo, dejó un patrón inusual de daños: algunos vehículos quedaron completamente destruidos mientras otros, a escasa distancia, permanecieron intactos. Este comportamiento ha despertado aún más sospechas y plantea interrogantes entre los investigadores y los residentes. La reciente detención de los sospechosos es un avance importante para esclarecer los detalles de este incidente. La audiencia de los arrestados en el juzgado representa un paso clave en la investigación judicial, que busca determinar la responsabilidad y motivación detrás del incendio.
El despliegue de los cuerpos de seguridad y el servicio de bomberos reflejó la gravedad de la situación. La Guardia Civil, el Servicio de Carreteras y el 061 acudieron al lugar para garantizar la seguridad y asistir a los afectados. La rápida respuesta de los servicios de emergencia fue fundamental para evitar consecuencias personales más graves. Este incidente destaca la necesidad urgente de mejorar las condiciones de seguridad en los garajes comunitarios. La comunidad de El Alisal y otras áreas afectadas esperan que se tomen medidas efectivas para evitar tragedias similares en el futuro, garantizando sistemas de seguridad y alarmas antiincendios plenamente operativos y actualizados.
Como hemos visto, los problemas estructurales de los parkings pueden deberse a errores en el diseño o circunstancias que tienen más que ver con cosas anormales tanto del clima como del vandalismo o el abandono de los propietarios y autoridades. También sucedió hace más de veinte años que un atentado terrorista acabó con parte del forjado del parking de Santander situado en la placita de Correos. Una circunstancia extremadamente rara y con un material explosivo que recordaba mucho al que agujereó el forjado del parking del Hipercor de Barcelona cuando ocurrió el atentado del 87. Es decir: la utilización de explosivos especiales de alto poder de destrucción o el sobrepeso sobre la estructura o un terremoto es lo único que puede realmente explicar semejantes daños en una estructura tan fuerte de por sí.