Hace falta ser desgraciado y anormal: apuñalar a dos personas por una ensalada de 8 dólares que estaba robando, pero es que a continuación va y se ríe en la cara de la jueza cuando ésta estaba relatando los delitos de este personaje. Ni más ni menos que casi matar a dos trabajadores que le habían pillado intentando robar una ensalada César de pollo.
Esto no es gracioso, respondió la jueza. Podrías haber matado a la víctima.
El tarado todavía tenía algo que argumentar sobre su comportamiento random, pero la jueza le confrontó con una calma que ya es bastante peculiar en ella. Y es que estamos hablando de una jueza de Florida, que es bastante célebre por las interacciones surrealistas que ha tenido con varios detenidos hasta la fecha.
No tendrías que robar. Y no tendrías que apuñalar a nadie por una ensalada ni por ninguna cosa.
![](https://contrastado.com/wp-content/uploads/2023/11/chicken-salad-santander-2-1024x905.jpg)
En otra ocasión, esta misma jueza se encontró en el juzgado con un señor al que había conocido de niña en la escuela y al cual reconoció. El tipo se echó a llorar cuando se dio cuenta de que realmente se conocían.
En otra vista oral, todavía más surrealista, la jueza reconoció a un tipo con el que había compartido crucero recientemente. Y el otro asintió ante esta impresionante fisonomista, tan contento, como si no estuviera afrontando algún tipo de procedimiento criminal.
![](https://contrastado.com/wp-content/uploads/2023/06/nachos-domicilio-santander-5-1536x1123-1-1024x749.jpg)